Seguro que ya eres consciente de lo importante que es seguir una rutina diaria de higiene bucal. ¿Pero sabías que es igual de importante para tu bebé? Los dientes de tu hijo son tan susceptibles a las caries y el deterioro como los tuyos. De hecho, la caries es la enfermedad infecciosa crónica más común en la infancia. Los dientes de leche sientan las bases para las piezas permanentes, por lo que las caries en los dientes iniciales pueden conllevar un mayor riesgo de problemas bucales más adelante en la vida. De ahí que sea fundamental conocer los síntomas, las causas y cómo tratar y prevenir las caries y el deterioro en los dientes de los bebés.
Síntomas de deterioro dental en bebés
El primer paso es saber qué aspecto tiene una caries; para ello, mira las encías del niño. Si sangran a menudo o las notas enrojecidas o inflamadas, lo más probable es que haya bacterias atrapadas. Una de las zonas clave que debes vigilar es el borde de las encías de los dientes delanteros; si ves unos pequeños puntos blancos, podrían indicar que hay placa dental. Desafortunadamente, estos síntomas pueden ser muy difíciles de detectar si no se dispone del material adecuado, por lo que se recomienda comenzar las visitas periódicas al dentista tan pronto como eche el primer diente, lo que suele ocurrir a los seis meses.
¿Qué causa las caries en los dientes de leche?
Las caries en los dientes de los bebés son iguales que las de los adultos y se deben a tres factores principales: el azúcar, la placa dental y el ácido. Las bacterias que hay en la placa dental descomponen el azúcar y lo convierten en un ácido que desgasta el esmalte. Las caries son los orificios que se forman en ese esmalte dañado. Este proceso de deterioro se inicia en cuanto sale el primer diente.
Otra de las grandes causas de caries en los dientes de leche es un elemento de uso diario: el biberón. Cuando el niño bebe de un biberón o de una taza antigoteo, los líquidos se acumulan alrededor de los dientes y las encías. Cuando beben algo que no es agua, como leche, leche en polvo o zumo, los dientes básicamente se empapan de azúcar y otros residuos que provocan caries. Por eso, se recomienda ir quitando el biberón poco a poco antes de que llegue al año para evitar este tipo de deterioro bucal. En este sentido, deberías procurar que tu hijo se acostumbre a los vasos normales a partir de los 6 meses. Por último, si lo pones a dormir con un biberón, que solo sea de agua.
Tratamiento de las caries en los dientes de leche
Buenas noticias: las caries se pueden prevenir fácilmente. Lo único que necesitas para conseguir que tu hijo tenga una sonrisa sana es acostumbrarlo a unos buenos hábitos diarios de higiene bucal. Empecemos por lo más importante: cepillarse los dientes al menos dos veces al día con una pasta con flúor. Prueba el dentífrico Oral-B Pro Kids 0-6 años para bebés de 0-2 años.
Esto no solo contribuye a prevenir las caries, sino que también establece una rutina importante en la primera etapa del desarrollo de tu hijo. Pon una pequeña cantidad de pasta de dientes, del tamaño de un grano de arroz, en un cepillo manual especial para bebés, como los de Oral-B para bebés de 0-2 años, y lávale delicadamente los dientes. Al acabar, es importante que le pases un trapo suave con cuidado por los dientes y las encías. Deberías empezar a hacerlo tan pronto como le salga el primer diente.
Otro factor crucial es no incluir comida ni bebidas azucaradas en la dieta del bebé. Consumir menos azúcar equivale a producir menos ácido y, por tanto, a tener un esmalte más fuerte. Lee las etiquetas de los productos y descarta los más dañinos, como los zumos y refrescos, pero también la fruta deshidratada y los hidratos de carbono almidonados, como las barras de cereales. Incluso la comida preparada para bebés puede llevar mucho azúcar. Recuerda también que, si le das un biberón por la noche, que solo sea de agua.
Preguntas relacionadas con las caries en los dientes de leche
¿Las caries en los dientes de leche afectan a los dientes permanentes?
Sí. Las caries y el deterioro de los dientes de leche pueden aumentar las probabilidades de que los dientes permanentes no crezcan rectos o bien retrasar la aparición de los dientes permanentes.
Si mi hijo tiene caries, ¿debería llevarlo a que se las empasten?
Sí, los empastes son seguros y es la opción más recomendada para tratar caries en bebés y dientes de leche. Además, evitan la propagación de la caries por la boca del niño.
¿Debería cepillarle los dientes a mi hijo?
Sí. En cuanto a tu hijo le salga el primer diente, debes empezar a cepillarle dos veces al día con pasta dentífrica con flúor. Los dentistas recomiendan que sea un adulto quien le lave los dientes hasta que el niño cumpla 7 años; a partir de esa edad, tu hijo puede aprender a hacerlo por su cuenta.
¿Cuándo deben comenzar las visitas al dentista?
La primera visita al dentista debe llevarse a cabo en la misma época en la que empiece el cepillado, es decir, cuando el bebé eche su primer diente. Tras la visita inicial, lo recomendable es volver a llevarlo cada 6 o 12 meses.
Este blog ha sido revisado y autorizado por el Dr. Robert Lee, un dentista con 35 años de experiencia