Si te van a extraer un diente, puede que tu dentista te mencione algo llamado alveolitis seca. Esto ocurre cuando un coágulo de sangre se daña o no se forma correctamente como barrera protectora en la boca después de la extracción de un diente.
Aunque la alveolitis seca es una afección dolorosa, es muy poco frecuente — los estudios sugieren que afecta a alrededor del 1,8 % de las personas después de una extracción dental. Por lo general, puede evitarse siguiendo los consejos del dentista sobre los cuidados posteriores.
En cuanto a la detección del alveolo seco, puede haber signos visibles de hueso cerca de la zona de extracción y que tengas oleadas de dolor intenso en la zona.
Causas de la alveolitis seca
- Contaminación bacteriana por alimentos o bebidas tras la cirugía
Los restos de comida quedan atrapados en el hueco del diente y, junto con las bacterias orales, pueden provocar la ruptura de los coágulos de sangre e interferir en el proceso de curación. Es por eso que los dentistas te dirán que no comas ni bebas durante un periodo de tiempo después de la extracción.
- Traumatismo por cepillado u objetos extraños
Perturbar físicamente un coágulo de sangre inmediatamente después de la operación puede provocar su desprendimiento y ralentizar el proceso de curación.
- Efectos del tabaco y la nicotina
Además de resecar la boca con el humo, la nicotina disminuye el riego sanguíneo a la zona, afectando a la formación de coágulos.
- Píldoras anticonceptivas
Los altos niveles de estrógeno de los anticonceptivos orales pueden afectar al proceso de cicatrización de la boca y provocar sequedad en algunas personas.
Síntomas de la alveolitis seca
Los signos de alveolitis seca a los que hay que prestar atención son una mezcla de sensaciones dolorosas que puedes sentir inmediatamente después de la cirugía; otros síntomas son:
- Ausencia de un coágulo de sangre en el alveolo y hueso visible dentro del alveolo: cuando no se forma un coágulo de sangre después de la intervención.
- Dolor punzante en la encía o la mandíbula: tres días después de la extracción de un diente, la sensación de dolor debería desaparecer y debe poder controlarse con analgésicos. Una sensación punzante durante más tiempo es un síntoma revelador de alveolitis seca.
- Olor desagradable y mal sabor procedentes del alveolo vacío: otro síntoma común de alveolitis seca es el mal aliento y un persistente sabor desagradable en la boca. Si esto persiste después de utilizar un enjuague antibacteriano (como un colutorio), debes acudir a tu dentista de inmediato.
- Dolor que se irradia al resto de la cara: además de un dolor punzante en la zona de la intervención, otro síntoma habitual para saber si tienes alveolitis seca es un dolor que se transmite al oído, el ojo, la sien o el cuello.
Tratamiento de la alveolitis seca
- Limpieza del alveolo:
uno de los primeros tratamientos que suelen ofrecer los dentistas es la limpieza de la zona afectada para eliminar los restos de comida y las bacterias. Esto puede ayudar a aliviar el dolor del alveolo seco.
- Apósitos medicinales:
tu dentista puede también aplicar un apósito medicado para rellenar el alveolo una vez esté limpio.
- Tomar analgésicos como la aspirina o el ibuprofeno:
en caso de dolor leve, el tratamiento puede comenzar en casa con analgésicos suaves o con una compresa fría en la zona afectada.
- Prescripción de analgésicos:
si el dolor es persistente e intenso, el dentista puede recetarte un analgésico más fuerte.
- Higiene oral:
Mantén la zona limpia enjuagando suavemente con agua salada o con un colutorio antibacteriano.
Cómo prevenir la alveolitis seca
Prevenirlo no siempre es posible, pero siguiendo unos sencillos consejos puedes tener una mayor probabilidad de que se forme un coágulo de sangre que proteja el alveolo después de una extracción y permita su curación.
- Evita el uso de pajitas:
si te estás preguntando cómo prevenir la alveolitis seca, una de las respuestas más comunes es mantenerse alejado de cualquier objeto extraño que pueda perturbar un coágulo de sangre.
La fuerza de succión al utilizar una pajita puede desalojar el coágulo y provocar una alveolitis seca.
- Correcta higiene bucal:
Con el fin de prevenir la alveolitis seca, tu dentista puede aconsejarte sobre la mejor rutina de higiene bucal. Por lo general se recomienda un simple enjuague con un colutorio antibacteriano y una limpieza suave con un cepillo eléctrico y un dentífrico antibacteriano como el fluoruro de estaño una vez que se ha formado el coágulo.
- Evita el tabaco:
fumar supone un riesgo mucho mayor de desarrollar una alveolitis seca debido a las sustancias químicas que se encuentran en el tabaco. Además, el acto de inhalar puede impedir la formación de un coágulo de sangre.
Los dentistas suelen aconsejar que se evite el consumo de productos con nicotina durante unos 3 días después de la extracción.
- Alimentos blandos:
inmediatamente después de una extracción dental, debes limitarte a consumir alimentos muy blandos, como yogur y puré de patatas. Al segundo día, a medida que la boca vaya recuperándose, podrás volver a consumir alimentos más sólidos.
Preguntas frecuentes sobre la alveolitis seca
- ¿La alveolitis seca se cura por sí sola?
Tu dentista puede sugerirte que dejes que se recupere por sí sola, siempre y cuando la zona se mantenga limpia y evites irritar el coágulo. Suele curarse de forma natural en el plazo de una semana.
- ¿Cuándo aparecen los primeros signos de alveolitis seca?
Después de una extracción dental, el nuevo hueco (alveolo) debería empezar a cicatrizar inmediatamente, por lo que los síntomas serán evidentes en los dos primeros días después de la intervención.
- ¿Cuándo puedo dejar de preocuparme por la alveolitis seca?
Si el coágulo se forma en los días posteriores a la intervención, no tendrás que preocuparte sobre qué hacer en caso de alveolitis seca. Si no se forma, el proceso de curación debería durar alrededor de una semana.
- ¿Puedo tratar la alveolitis seca en casa?
Si crees que puedes tener alveolitis seca, acude a tu dentista inmediatamente. Acompaña el tratamiento de tu dentista con una buena higiene bucal en casa y evita usar pajitas y fumar durante los próximos días.
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